No sé nada de ti, y se me marchita el cielo.
No sé nada de ti, y el aire se vuelve espeso,
la mirada se me cae, hundida por los recuerdos.No sé nada de ti, y mis manos se vuelven hiedras,
que trepan por tu memoria al ritmo del tiempo muerto.No sé nada de ti, y mis pulsos se detienen,
como se para el fuego comido por el hielo.No sé nada de ti, amor, y quisiera saberlo.
Saber que añoras mis besos,
que respiras con mi aliento,que duermes entre mis brazos sueños de terciopelo.
Que me añoras como te quiero,
que me quieres como te espero,que necesitas mis ojos como el lucero al cielo.
No sé nada de ti, amor, yo quisiera saberlo.
©Nicanor García Ordiz, 2004.
